Antes de entrar de lleno, en esta sencilla receta del risotto de tomate, conviene que recuerdes algunos conceptos fundamentales acerca de la dieta sin gluten.

Siendo el gluten una proteína presente en el trigo, la cebada y el centeno, una dieta sin gluten, es un plan de alimentación que excluye a esos cereales.
El objetivo de este tipo de alimentación, es controlar los signos y síntomas de la enfermedad celíaca y otras afecciones médicas asociadas con esta proteína.
¿Qué es la celiaquía?
La celiaquía es un trastorno autoinmune, en la que el gluten, desencadena cierta actividad en dicho sistema, que deteriora el revestimiento del intestino delgado.
Este daño impide, en ese órgano, la absorción de los nutrientes de los alimentos.
Esa sensibilidad al gluten, causa algunos signos y síntomas, que incluyen dolor abdominal, hinchazón, diarrea, estreñimiento, dificultades para concentrarse, erupción cutánea o dolor de cabeza, aunque, el tejido del intestino delgado, no se daña.
Otra manifestación patológica, derivada de la ingesta de gluten, es la ataxia por gluten, otro trastorno autoinmune, que afecta ciertos tejidos nerviosos y causa problemas con el control muscular y el movimiento muscular voluntario.
Todas estas manifestaciones, junto con otras alergias alimentarias, se producen cuando el sistema inmunológico confunde al gluten, o, a alguna otra proteína, que se encuentra en estos cereales, con una sustancia que causa enfermedades, como un virus o una bacteria.
El sistema inmune crea un anticuerpo contra la proteína, y, esto, provoca una respuesta, que puede dar lugar a congestión, dificultades respiratorias y otros síntomas.
Por eso, es tan importante, la atención que le prestes a la comida que elijas, como los ingredientes que contiene y su correspondiente valor nutricional.
Pero, ya es hora de la receta del risotto de tomate:

El risotto de tomate es una receta sencilla, pero deliciosa que seguramente sorprenderá a tus invitados.
Este plato italiano, de arroz cremoso, es reconfortante y perfecto para cualquier ocasión.
Lo mejor de todo, es que, los ingredientes que necesitarás, son simples y fáciles de encontrar.
¿Qué es un risotto?
Un risotto es un plato italiano, hecho a base de arroz, que se caracteriza por su textura cremosa y su rico sabor.
Se originó en el norte de Italia y se ha convertido en una receta muy popular en todo el mundo.
El arroz se cocina, lentamente, en un caldo caliente y se le agrega una variedad de ingredientes, como en este caso, el tomate.
Ingredientes para el risotto de tomates
- 300 gramos de arroz Arborio o Carnaroli
- 500 gramos de tomates maduros
- 1 cebolla mediana
- 2 dientes de ajo
- 1 litro de caldo de verduras casero
- 100 ml de vino blanco
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
- Parmesano rallado para espolvorear
Preparación
Sofrito de tomate
Para preparar el sofrito de tomate, comienza pelando y cortando los tomates en cubitos pequeños.
En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva y agrega la cebolla picada y los ajos picados.
Sofríe a fuego medio, hasta que la cebolla esté transparente.
Luego, agrega los tomates picados y cocina a fuego lento hasta que se haya reducido su líquido y la salsa tenga una consistencia espesa.
Caldo de verduras
Para hacer el caldo de verduras casero, necesitarás cortar, en trozos grandes, algunas verduras frescas como zanahorias, apio y cebolla.
En una olla grande, agrega las verduras y cubre con agua.
Lleva a ebullición y luego reduce el fuego a medio-bajo.
Cocina a fuego lento, durante al menos 1 hora, para que el caldo obtenga todo el sabor de las verduras.
Cuela el caldo y desecha las verduras.
Risotto de tomate
Para hacer el risotto de tomate, comienza calentando un poco de aceite de oliva en una olla grande.
Agrega el arroz y revuélvelo para que se impregne de aceite.
Luego, agrega el vino blanco y revuelve hasta que se haya evaporado.
Poco a poco, ve agregando el caldo de verduras caliente al arroz, una taza a la vez.
Asegúrate de revolver constantemente, para que el arroz suelte su almidón y se vuelva cremoso.
Continúa agregando caldo y revolviendo hasta que el arroz esté al dente, aproximadamente, 20 minutos.
Una vez que el arroz esté listo, agrega el sofrito de tomate y mezcla bien.
Cocina por unos minutos más hasta que todo esté bien incorporado.
Prueba y ajusta la sazón con sal y pimienta.
Presentación y sugerencias de degustación
El risotto de tomate, se puede servir como plato principal o como acompañamiento.
Puedes presentarlo en platos individuales y espolvorearlo con queso parmesano rallado.
Si deseas, también puedes agregar algunas hojas de albahaca fresca para darle un toque de color y sabor extra.
Consejos y trucos para un risotto perfecto
Para asegurarte de que tu risotto de tomate sea perfecto, aquí tienes algunos consejos y trucos:
- Elige arroz Arborio o Carnaroli, ya que contienen mucho almidón y eso es lo que le dará la textura cremosa al risotto.
- Agrega el caldo caliente al arroz de a poco, asegurándote de que cada taza de caldo se absorba antes de agregar la siguiente.
- Mantén la temperatura del fuego constante y no dejes de revolver el arroz, esto ayudará a liberar el almidón y a lograr un risotto cremoso.
Variaciones de la receta de risotto de tomate
Si quieres experimentar con diferentes sabores, aquí tienes algunas variaciones que puedes probar:
- Agrega queso mozzarella picado, al final de la cocción, para darle un toque extra de cremosidad.
- Incorpora hierbas frescas como albahaca, orégano o tomillo para darle aroma y sabor.
- Añade otros ingredientes, como champiñones salteados, espárragos o camarones, para hacer un risotto más completo y sustancioso.
Otros risottos, otros sabores
Risotto de tomates asados

Asar los tomates intensifica su sabor, lo que resulta perfecto para añadirlos a un risotto cremoso y hacer una comida satisfactoria entre semana.
Ingredientes
- 500 grs. de tomates Cherry, cortados por la mitad
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1 cebolla pequeña, finamente picada
- 2 dientes de ajo machacados
- 150 grs.de arroz para risotto
- 25 grs.de puré de tomate o un tomate pequeño triturado
- 600 ml de caldo de verduras caliente
- Manteca
- Queso parmesano, finamente rallado
- puñado de hojas de albahaca fresca
- sal
Preparación
Precalienta el horno a 200/220 °C y cubre una bandeja para hornear con papel para hornear.
Coloca los tomates en la bandeja en una capa uniforme, con el lado cortado hacia arriba, y sazona con una pizca de sal.
Ásalos durante 25 minutos, hasta que estén tiernos y tengan una consistencia gelatinosa.
Mientras tanto, calienta el aceite en una sartén profunda, agrega la cebolla y el ajo, cocinando a fuego lento durante 5 minutos, hasta que estén tiernos.
Incorpora el arroz y el puré de tomate o 1 tomate pequeño triturado y cocina durante 2 minutos.
Luego, vierte un cucharón de caldo.
Revuelve, hasta que el caldo se haya absorbido, luego, agrega otro cucharón y continúa revolviendo.
Sigue agregando el caldo de un cucharón a la vez, revolviendo constantemente, hasta que el arroz haya absorbido todo el caldo, debe estar apenas cocido, pero, debe conservar un poco de consistencia.
Retira la sartén del fuego y agrega la manteca y la mitad del queso.
Incorpora los tomates Cherry asados y sirve con una cuchara en tazones tibios.
Cubre con el queso restante, esparce las hojas de albahaca y sirve
Risotto de calabaza y parmesano

Este risotto de calabaza y parmesano, al horno, parece poco llamativo, pero, con unos cuantos toques culinarios, se transforma, milagrosamente, en un risotto cremoso con un color magnífico, al que nadie puede resistirse.
Y puedes preparar todo esto, sin estar de pie frente a la cocina caliente, revolviendo constantemente…
Créelo, puedes preparar un risotto increíble y cremoso… ¡en el horno!
Para los amantes de la calabaza, para los amantes del risotto, para los amantes de la buena comida, si no conoces las maravillas de este risotto de calabaza, esta receta te cambiará la vida.
Es realmente cremoso, tiene un aspecto y un sabor exquisitos y ni siquiera lleva una gota de crema.
Ingredientes
- 300 g de arroz arborio o arroz carnaroli
- 800 ml de caldo de verduras
- 1 kg de calabaza sin piel ni semillas
- 1 cebolla
- 4 cucharadas de queso parmesano rallado
- 1 cucharada de manteca
- Sal y pimienta, a gusto
- Aceite de oliva, a gusto
Preparación
Te sorprenderá lo fácil que es hacer risotto en el horno.
Comienza como un risotto normal, con ajo y cebolla rehogados.
No puedes obviar esta base de sabor.
Tampoco vas a querer pasar por alto, el desglasado de la olla con un toque de vino blanco, o caldo, o incluso agua, y tostar, ligeramente, el risotto en la olla.
A partir de aquí, la receta cambia por completo respecto a la tradicional de risotto.
Añades los líquidos y la calabaza, lo remueves, lo tapas y lo horneas durante 25 minutos.
No revuelvas ni una sola vez.
De hecho, tienes prohibido abrir el horno.
Si lo haces, perderás calor y estropearás el proceso de cocción.
Una vez retirado del horno, abre y verás un arroz de aspecto muy pesado, lo más alejado posible de un risotto cremoso.
Pero, ten fe, porque es aquí donde comienza la magia.
Revuelve vigorosamente y observa cómo la calabaza, blanda y cocida, se desintegra y se transforma en un puré, que crea la salsa cremosa de calabaza para este risotto.
Con el arroz perfectamente cocido y un sabor sabroso y dulce gracias a la calabaza, ya tienes tu plato de lujo para lucirte.
Tabla nutricional para el risotto de tomate
Ingrediente | Calorías (kcal) | Proteínas (g) | Grasas (g) | Carbohidratos (g) | Fibra (g) |
Arroz blanco (cocido) | 130 | 2.7 | 0.3 | 28 | 0.4 |
Tomates | 18 | 0.9 | 0.2 | 3.9 | 1.2 |
Cebolla | 40 | 1.1 | 0.1 | 9.3 | 1.7 |
Ajo | 149 | 6.4 | 0.5 | 33 | 2.1 |
Queso parmesano | 431 | 38 | 29 | 4.1 | 0 |
Detalles adicionales:
- Arroz blanco: Fuente importante de carbohidratos simples.
- Tomates: Bajos en calorías, ricos en antioxidantes (como el licopeno) y vitaminas.
- Cebolla: Aporta sabor y fibra, es baja en calorías.
- Ajo: Rico en alicina, contribuye con antioxidantes y es un potenciador del sabor.
- Queso parmesano: Alto en grasas y proteínas, excelente fuente de calcio.
Preguntas frecuentes sobre el risotto de tomate
1. ¿Cuál es el tipo de arroz ideal para hacer risotto de tomate?
El mejor arroz para hacer risotto es el arborio o el carnaroli.
Estos tipos de arroz tienen un alto contenido de almidón, lo que permite que el risotto quede cremoso y absorba bien los sabores.
También mantienen su textura al dente, sin deshacerse durante la cocción.
2. ¿Cómo puedo evitar que mi risotto de tomate se quede seco?
El risotto necesita ser cocido lentamente, añadiendo el caldo caliente poco a poco, removiendo constantemente.
Si tu risotto de tomate queda seco, puede ser porque no estás añadiendo suficiente caldo o no remueves con frecuencia.
Asegúrate de tener siempre caldo a mano para ir agregándolo a medida que el arroz lo absorba.
3. ¿Qué tipo de tomates son los mejores para un risotto de tomate?
Los tomates frescos tipo Roma o jitomates son ideales porque tienen poca agua y mucho sabor.
También puedes usar tomates Cherry para un toque más dulce o, incluso, tomate triturado enlatado, si no tienes frescos, siempre que sea de buena calidad.
4. ¿Cuánto queso parmesano se debe agregar al risotto de tomate?
La cantidad puede variar según tu preferencia, pero, generalmente, se recomienda añadir entre 30 y 50 gramos de queso parmesano rallado por porción.
Se incorpora al final de la cocción, para darle al risotto un toque cremoso y salado, pero puedes ajustar la cantidad según tu gusto.
5. ¿Puedo hacer risotto de tomate sin vino?
Sí, puedes hacer risotto de tomate sin vino.
Aunque el vino blanco agrega un toque ácido y profundidad de sabor, puedes reemplazarlo por más caldo o, incluso, un chorrito de vinagre de manzana o jugo de limón para equilibrar la acidez.
Simplemente, omite el paso del vino y sigue con el caldo.